Viajes oficiales de España a África
A principios de abril de 2022, el viaje oficial de Pedro Sánchez a Marruecos dió mucho que hablar. Una visita, que no sólo estuvo marcada por la tensión tras la acogida del líder del Frente Polisario, Brahim Ghali, en España o por los eventos migratorios en la Playa del Tarajal, sino también por errores en el protocolo. Durante la cena, Mohamed VI recibió al presidente con la bandera de España al revés, lo que algunos interpretaron como un símbolo de rendición ante la corona alauí.
En otro de sus recientes periplos internacionales, Pedro Sánchez confundió hasta en dos ocasiones Kenia con Senegal durante una comparecencia. Su homólogo keniata, William Ruto, tuvo que corregir al presidente español. “De Kenia”, le apuntó tras referirse a él como presidente de Senegal, a más de 6.000 kilómetros. La reciente visita a Kenia y Sudáfrica ha marcado un hito en las relaciones exteriores y diplomáticas de España con África Subsahariana. Por primera vez en 40 años de democracia, un presidente del gobierno de España ha visitado ambos países, que además son claves para el desarrollo científico y empresarial de la región. Hasta entonces, y considerando los últimos diez años de visitas oficiales al extranjero, Pedro Sánchez visitó un total de diez países africanos y su antecesor, Mariano Rajoy, ocho. A diferencia de Rajoy, Sánchez visitó Mauritania, Libia, Egipto, Angola, Kenia y Sudáfrica, mientras que el presidente popular visitó Yibuti en 2013, Guinea Ecuatorial en 2014, Costa de Marfil en 2017 y Túnez en 2018. A pesar de las diferentes líneas de rutas, ambos han cumplido con la visita de rigor a países como Marruecos, Argelia, Mali y Senegal, clave para la política exterior española. En los dos primeros casos por la cercanía a la frontera terrestre y la presión migratoria, en el caso de Mali para la prevención y erradicación de los grupos terroristas y en cuanto a Senegal, por la progresiva expansión de la influencia de la lengua española en el país. En 2021, el Instituto Cervantes abrió sus puertas en Dakar, el primero en África Subsahariana.
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Todo al norte y al Sahel
Las visitas oficiales se concentran, tanto por frecuencia como por cantidad, en el norte de África y en la zona del Sahel, independientemente del cargo. Marruecos encabeza el número de visitas de todo el continente, de las cuales seis son de presidentes del gobierno, nueve de ministros de Asuntos Exteriores y 81 de otras personalidades como el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska o el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig en 2020.
Le sigue Argelia con un total de 43 visitas: dos de presidentes del Gobierno, 11 de ministros de Exteriores y los 30 restantes de otros personajes políticos e institucionales. Senegal se queda cerca con 40 visitas en total y Mali cierra el top cuatro con 23 visitas, de las cuales dos son del expresidente Mariano Rajoy y del actual presidente Pedro Sánchez.
Leves huellas
Hay países que, a pesar de no recibir visitas de altos cargos gubernamentales, sí que son escenario de reunión y trabajo para organismos especializados. Como por ejemplo en Liberia. Allí, tres de las cuatro visitas españolas fueron de María Fernández de la Vega, presidenta de la Fundación Mujeres por África.
Aun así, salta a la vista el caso de Cabo Verde. Hasta 29 personas han visitado el archipiélago en los últimos diez años. Una cifra baja pero que llama la atención cuando hablamos de uno de los países más pequeños del continente, menos influyentes y con una relación diplomática prácticamente inapreciable con España. La última visita la protagonizó una Delegación de las Islas Canarias con motivo de la presentación de los Programas MAC, encabezada por la directora general de Asuntos Económicos con África del Gobierno canario, Dª Nassara Cabrera. En 2014, Mariano Rajoy viajó a Guinea Ecuatorial, pero desde entonces y hasta ahora, la una única visita salta a la vista cuando hablamos de una excolonia española. En aquel momento, fue la primera vez que un presidente español visitaba el país desde que lo hiciera Felipe González en 1991.