Todas deberíamos ser feministas... haciendo lo que podamos con lo que tenemos
🪻 Jacaranda es espacio donde una mujer no originaria de estas tierras comparta su mirada sobre literatura, cultura y feminismos.
Una mujer abre un pequeño libro en el autobús. Se lo ha regalado su hija por Navidad, le ha dicho que era importante que lo leyera. Ella no es mucho de leer este tipo de cosas, pero le da una oportunidad. Al fin y al cabo, es cortito y ha oído a hablar de ella en las noticias. Se ve que la autora es nigeriana, como ella, y que es muy inteligente y ha tenido un gran éxito mundial. El libro se titula “Todas deberíamos ser feministas”, y el nombre completo de su autora es Chimamanda Ngozi Adichie. Es una mujer nigeriana que ha estudiado en Estados Unidos y siempre se muestra orgullosa de su origen africano. También ha escuchado algunas charlas que se ha compartido su hija, aunque no la había leído nunca. Abre la página y sigue:
Decidí hablar de feminismo porque es algo muy importante para mí. Sospechaba que tal vez no fuera un tema muy popular, pero también confiaba en iniciar una conversación necesaria. De forma que aquella noche, mientras estaba sobre el estrado, sentí que me encontraba en presencia de una familia, de un público amable y atento, pero que podía oponer resistencia a mi charla. Al final su aplauso cerrado me dio esperanzas.
Chimamanda Ngozi Adichie obtuvo una licenciatura en Comunicación y Ciencias Políticas en la Universidad de Drexel y más tarde un máster en Escritura Creativa en la Universidad Johns Hopkins. También tiene un máster en Estudios Africanos de Yale. Nacida, criada y muy arraigada a Lagos, es una de las figuras más famosas e influyentes no solamente de Nigeria, también del continente africano. Se puede entender bastante de la figura de Ngozi Adichie a partir de sus orígenes familiares: su padre fue profesor de estadística de la Universidad de Nigeria, y su madre, la primera mujer registrada como secretaria administrativa de esta misma. Así, un padre formado y una madre pionera han acompañado su crecimiento y formación desde su temprana edad.
Lo que muchas personas no saben es que la saltaría a la fama con su TED Talk en 2012 “We Should All Be Feminists” (Todos deberíamos ser feministas), volviéndose viral y transformada en un libro, estudió medicina y farmacia en Nigeria durante un año y medio. Sin embargo, unos años después decidió mudarse a Estados Unidos para perseguir su verdadera pasión: la escritura. Unos años después recibiría el Orange Prize for Fiction, en 2007, por su obra Medio Sol Amarillo, uno de los galardones más importantes de la literatura en Reino Unido. Entre algunas de sus obras más famosas, más allá de su best-seller, se encuentran La Flor Púrpura (2003), Americanah (2013), Querida Ijeawele. Cómo educar en el feminismo (2017) o El Peligro de la Historia Única (2018). Durante la pandemia, tras la pérdida de su padre, escribió Sobre el Duelo (2021), hasta ahora, su última obra. A lo largo de los años ha acumulado una gran lista de premios no solamente por su contribución literaria, sino también en su rol como activista feminista, decolonial y panafricana. Uno de los más relevantes es el título de Comandante de la Orden del Imperio Británico (CBE) por sus servicios a la literatura o ser la primera oradora nigeriana en Harvard University este mismo 2024.
La autora es conocida como una de las voces más comprometidas con la justicia social alrededor del mundo. Adichie es una mente brillante que ha decidido, al contrario de los que se recrean en sus torres de marfil, bajar al terreno y compartir su visión en un tono que puede llegar a todo el mundo. Por ello, su compromiso no solamente se encuentra en sus ideas, también en sus formas. Y es que las formas son muy importantes para la autora, que no pierde oportunidad para mostrar su orgullo nigeriano vistiendo marcas de su país (muchas veces curadas por su estilista y sobrina), así como dar apoyo a causas tanto locales como internacionales que tienen que ver con los derechos de las mujeres y la liberación feminista, como su crítica a la gestión del presidente de Nigeria o su respaldo a la industria de la moda nigeriana en su proyección pública. Adichie lidera con un ejemplo cotidiano, como amante de la moda y apasionada de los estilos de su país, pero también como madre de una hija nacida en 2016 que le ha llevado a hablar del rol de la maternidad en el feminismo y de cómo generar una mentalidad de empoderamiento. Como resultado de estas ambiciones, tanto personales como políticas, quizás la más paradigmática es la Chimamanda Ngozi Adichie Foundation en Nigeria, centrada en la educación y el empoderamiento de jóvenes escritores y líderes africanos, su anunciación como embajadora de buena voluntad para la UNESCO en 2022 o su organización en 2023 del Nsukka Renaissance, festival literario celebrado en Lagos para fomentar nuevas voces en la cultura y literatura africana y nigeriana.
Chimamanda Ngozi Adichie es una de las grandes autoras de nuestro tiempo, y no solamente por su capacidad de escribir y contar las cosas en un tono claro, sincero y cercano, también por lo que es capaz de despertar en personas de todo el mundo. Para las originarias del continente africano, se convierte en una referente. Para las blancas y personas de otros lugares del mundo, es un ejemplo de mujer negra que tiene mucho que decir, y a la que debemos escuchar. Por ello, en 2024 ha sido reconocida como una de las 100 Personas Más Influyentes del Mundo de la revista Time por cuarta vez, consolidando su posición como una intelectual y escritora que marca la pauta en debates globales sobre género, raza y política.
La mujer cierra el libro porque está a punto de llegar a su parada. Sonríe por dentro pensando que, cuando sea un poco mayor, se lo regalará a su nieta. Recuerda dulcemente los momentos de su infancia en los que se peleaba con sus hermanos, los llantos en la almohada por las burlas de los chicos en el colegio, el abrazo de su mejor amiga a lo largo de los años. Ojalá su nieta pueda vivirse de otra forma.