La peor sequía en 40 años azota el Este de África
"En mis 40 años nunca he visto nada igual. En los últimos cuatro años ha pasado de todo: inundaciones, sequías, hambruna, violencia, Covid-19. Estoy cansada de vivir". Estas palabras las dice Nyadang Martha, una vecina de la localidad de Akobo en Sudán del Sur. En ese país, un 70% de las personas necesitan ayuda humanitaria. La peor sequía desde la década de 1980 está causando una situación crítica en el Este de África, desde el norte de Kenia y sur de Sudán del Sur hasta Yibuti pasando por partes de Etiopía y Somalia.
Oxfam calcula que hasta 21 millones de personas están en situación de hambruna y que más del doble, una población similar a la de España, necesita ayuda humanitaria en la región. A pesar de ser el continente que menos aporta al calentamiento global, África cuenta con los países que más lo sufren por geografía y falta de preparación. La hambruna es el efecto más directo, pero a ella se suman efectos a corto plazo como la subida de precios de los alimentos y a largo como la malnutrición.
Una parte importante para combatirlo son los fondos de interés gubernamental. A pesar del dinero exterior, el plan de respuesta en 2021 de Kenia no llegó al 10% del total, mientras que en Somalia solo se ha cubierto el 4% del dinero necesario para asistir a las personas más afectadas. Con el cambio climático, la vida rural se hace cada vez más dura y amenaza a la soberanía alimentaria a largo plazo del continente, conforme la población marcha a las ciudades.