El Reich Africano
🌍 Un thriller de un mercenario británico que lucha contra el poder de unos nazis victoriosos y con ansias de arianizar el continente negro. Una distopía que peca de demasiada acción.
Autor: Guy Saville
Editorial: Ediciones B
Género: Thriller distópico
Año del libro: 2011
Precio: 9,95€
Páginas: 496
Lugar: África
Un horror
Los guionistas occidentales siempre ha tenido una predilección por revivir las grandes guerras. La Alemania Nazi ha dado para muchos libros y películas, pero la mayoría acaban con lo que pasó realmente: los malos, los nazis, pierden, y el bueno de la película que se enfrenta a ellos, por muy pequeño que sea, acaba ganando. A mi padre siempre le han gustado las películas bélicas y algo se me ha pegado, pero más todavía cuando hablaban de historia. Por eso cuando di con la serie de El Hombre en el Castillo sobre una distopía en la que los nazis y los japoneses habían conquistado y se repartían Estados Unidos me enganchó.
Resulta que a Guy Saville también. El periodista y escritor británico leyó el libro, fuente de la serie, y en ella se quedó clavado en la frase "el experimento nazi en África". “Esa sola línea fue la inspiración directa para mis libros”, admitió en una entrevista a El Periódico. El Reich Africano lo copia y lo lleva a África: un mundo en el que los nazis han ganado la Segunda Guerra Mundial y colonizan el continente.
Bien, pues andaba yo por Santander de vacaciones con mi pareja y tras comer con mi amigo Alfonso y la suya pasamos por la feria del libro antiguo. Encontré este libro, que no lo es tanto, y enseguida me captó su portada, cuanto menos polémica y que mi padre después me pedía que escondiera de vacaciones para que no pensaran mal de mí.
Miento si dijera que no me esperaba otra cosa, tal vez influenciado por la serie basada en Estados Unidos. Este es un thriller en el que un mercenario británico, Burton Cole, lidera un grupo de combatientes para asesinar a un Oberstrguppenführer, o lo que es lo mismo, el capitán general de los Nazis en África, Walter E. Hochburg. El libro se basa principalmente en dos países africanos actuales: República Democrática del Congo y Angola. El primero es Nazi, el segundo está dividido: el sur es nazi y el norte portugués.
Saville explica muy bien qué ha pasado en el mundo distópico que crea, ubicando al lector desde un principio en una África de 1952 dividida entre el Imperio Británico y la Alemania Nazi. Habla de ese mundo distópico en el que los americanos no entran a la Segunda Guerra Mundial y los Nazis acaban conquistando todo, llegando a un acuerdo de paz con un Reino Unido debilitado para acabar la guerra.
Ahora, el libro no es una revisión histórica: Saville solo la utiliza para ubicar con acierto al lector y darle a entender por qué se llaman así las ciudades y que pasó. La realidad es que el libro no es más que el viaje e intento de huida de un Burton Cole al que le pasa de todo, incluso tal vez demasiado.
Ese es posiblemente el gran pero de un libro interesante que engancha, pero al que le falta precisamente en partes algo de la definición de un thriller: novela de suspenso o misterio. El libro recorre a Cole en pelea tras pelea, huida tras huida y siempre sale victorioso, sin ningún gran giro de guión inesperado que no cuente. No hay una segunda ni tercera línea narrativa que sea potente y que transcurra a lo largo de la historia, más allá de breves incisos en la vida de personajes como Patrick o el propio Hochburg. Seguir por ejemplo su pasado o su vida, así como la de Madeleine, a través del libro, hubiese sido una opción inteligente para diversificarlo y así eliminar tantas repetidas menciones de Cole a su amada que no añaden valor.
Además, la acción es quizá excesiva. Pensaba en este libro como una serie adaptada al estilo de El Hombre en el Castillo, pero serían básicamente escenas de acción una tras otra, con pequeños incisos de travesía. Los saltos de acción a acción son excesivos y precipitados, y a menudo te hacen dudar de en qué ubicación estás y cómo se ha pasado de una pelea a otra. En su lugar, reducirlos y poner un poco más de contexto histórico podría añadir fuerza al libro.
Lo que falta al libro es más protagonismo para los africanos. Que sea un mercenario británico quien vaya a salvar a África de los nazis es una visión muy colonialista que denota que el autor es un británico blanco. Sí, Saville incluye en la resistencia angoleña a personajes negros como Zuri y Nelia, dos hermanas de la etnia herero, pero a pesar de darles importancia de cara al final del relato, nunca son protagonistas del todo. Ahondar en sus personajes así como presentar a otros en el Deutsch Kongo hubiese enriquecido la historia, por no decir el que el protagonista fuese africano. Queda raro que sean Cole, Patrick y compañía como hombres blancos quienes se lamentan por los africanos, con todo el daño que sus países de origen también han causado en el continente. Saville ha preferido optar por una visión histórica que probablemente fuese más real en un mundo nazi, con los blancos mandando y los negros casi como esclavos, pero que ya puestos a una distopía, podría haber apostado más fuerte.
En conclusión, si te gusta la acción, las novelas históricas sobre los Nazis y leer sobre África, El Reich Africano de Saville te hace adentrarte en un mundo horroroso en el que los africanos no cuentan para nada y donde lees frases tan brutas y duras que dudas incluso de si pronunciarlas en tu mente. Pero sí, podrían haber ocurrido. Ahora, no esperes un libro histórico reposado ni nada por el estilo, solo una novela de ficción de un mercenario que no para de meterse en bullas.
Guy Saville nació en 1973 en el Reino Unido. Trabajó como periodista freelance para The Independent, The Guardian y The Sunday Telegraph. Ha vivido en Sudamérica y en África. En febrero de 2007, con El Reich Africano (Ediciones B, 2011), obtuvo el premio a la mejor novela del año otorgado por la reconocida web inglesa YouWriteOn.com. Al igual que su primera novela, ha recibido encendidos elogios de la crítica y ha estado en las listas de best sellers británicas.).