El primer aniversario de Mama Samia, la presidenta tanzana
"No soy un cheerleader, pero hay cosas que está haciendo bien y por ello le apoyamos a que siga mejorando". Si hace más de un año dicen que Tundu Lissu, candidato de la oposición tanzano, daría un piropo así al presidente de Tanzania te tacharían de loco. En noviembre de 2020, Lissu se exilió en Bélgica temiendo por su vida, pero en marzo falleció John Magufuli y tomó el relevo su vicepresidenta, Samia Suluhu Hassan, conocida en todo el país como Mama Samia.
La primera presidenta de la historia de Tanzania le ha dado un lavado de cara importante al país, frenando la deriva autoritaria de su predecesor. Su reunión con Lissu en Bruselas en febrero fue aplaudida en todo el país. Este es solo el último paso en un proceso aperturista que empezó por aceptar la existencia del Covid-19 y sus vacunas, negada por Magufuli hasta causarle la muerte, hasta despenalizar periódicos contrarios al gobierno. Su trato amigable con la sociedad civil ha sido un respiro en un país ahogado por una represión que, a pesar de todo, le funcionaba a un Magufuli que tenía apoyo entre parte de la población.
Mama Samia ha cambiado el rumbo de Tanzania, pero el miedo es que se quede en unas intenciones personales. Las leyes que permitieron la persecución de la prensa y rivales políticos siguen en su sitio y falta institucionalizar esos cambios para hacerlos duraderos. Pero para Mama Samia debe asentar su poder dentro del partido, con barones que aseguran el poder del CCM como partido líder del país. Un año ha dado para mucho, pero está por ver si el cambio de Mama Samia se queda en ella o significa un cambio a futuro en Tanzania.
P.D. La presidenta es musulmana y originaria de Zanzíbar. En agosto, David visitó el pueblo donde nació y visitó a su madre en su casa de la infancia. Si quieres conocerla más, te recomiendo el perfil que escribió junto con Laura Llach para Mundo Negro.